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sábado, 13 de junio de 2009

Capítulo IV Dentro de la pesadilla

Se acerco y vio que el lugar estaba abandonado y vio un rastro de sangre. Eso asusto mucho a Adolfo pero sabía que si había alguien herido tenía que ir a ayudar entonces el pequeño radio empezó a sonar de una manera extraña de la nada como si hubiera distorsión en la señal, de la misma forma el Ipod se prendía y apagaba de manera intermitente, Adolfo saco el radio junto con la pequeña navaja al mismo tiempo que a la lejanía se escucho el ruido de barras de metal moviéndose, volteo rápidamente y aquel sonido se escuchaba más cercano, entonces al enfocar la mirada al lugar de donde venía aquel sonido noto que algo se movía. Adolfo noto la cosa más rara, era unas cuantas barras de metal oxidado atadas a una manta con forma humana, que de alguna forma le recordaban a aquellos tianguis en los que solia trabajar, las barras llenas de sangre eran las que dejaba el rastro, Bopho se armo con su navaja y se acerco a examinar mientras aquella cosa extraña se movía hacia él. Entonces acercándose la cosa arremetió una de las barras hacia Adolfo, logro esquivar el primer ataque pero no asi el segundo el cual le dio en el brazo, Adolfo preso del pánico se armo del poco valor que le quedaba, acuchillo a la manta y noto que cuando lo hizo la manta sangro de una manera grotesca, así que lo volvió a hacer. Llego un momento en el que Adolfo no se controlo y arremetió mas cuchillazo de una manera insana como si lo disfrutara y la cosa extraña cayó al suelo, se tomo un momento para reflexionar, más calmado Bopho dio una sonrisa de satisfacción, examino su herida y escucho otro sonido igual al anterior , al voltear vio mas de esas cosas, Adolfo sabía que debía huir pero más de esas cosas lo habían rodeado, desesperado, arremetió contra una y la acuchillo pero aquel mounstruo le alcanzo a dar en la pierna y se cayó del dolor, intentando pelear en el suelo vio con terror como mas de esas cosas se le acercaron, Bopho sabía que era su fin y empezó a sentir unos pinchazos de dolor en todo el cuerpo, lo ultimo que sintió fue un fuerte golpe en la cabeza . . .

. . . era de noche el joven y la linda chica paseaban por una vieja calle de la ciudad mientras hablaban y reían, Adolfo era mas feliz que nunca en su vida, entonces justo antes llegar a la casa ella lo beso . . .

Se despertó de un golpe y vio que estaba en una cama blanca y rodeado por cuatro paredes y un techo totalmente desconocido y blanco. Vio el lugar y noto los artefactos de medicina y una mesilla vacía enfrente del, se examino el cuerpo y no noto ni una herida en su cuerpo, checo y en la mesilla de un lado se encontraba sus artefactos personales: su Ipod, el pequeño radio y la navaja

Continuará . . .

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