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martes, 30 de junio de 2009

Capítulo V ¿Solo un sueño?

Desperto . . . mareado y confundido. “habrá sido una pesadilla?” se susurro a si mismo, pero si fue una, ¿Cómo había llegado hasta donde estaba ahora? Había muchas dudas nublando su mente pero antes de que pudiese hacer algo, fue interrumpido . . . algo se acercaba. Era un ser deforme, sus movimientos no eran naturales y su cara aparentaba felicidad, llevaba vestimenta de enfermera y en sus brazos llevaba un tubo de metal. Sin pensarlo dos veces Adolfo salió corriendo del lugar. Estaba en el último piso de un hospital y su única esperanza era buscar una salida, así que hizo lo único que podía hacer, explorar.
Comenzó buscando en los cuartos del piso en el que se hallaba. Todas las puertas estaban cerradas excepto por la que había salido . . . y no planeaba regresar a ese lugar.
Finalmente hallo una puerta que llevaba a otro pasillo, a su lado los baños, uno cerrado y el otro abierto. Entro con temor solo para encontrar una pequeña botella, el texto en su etiqueta estaba borroso, sin embargo la guardo. Avanzo otro poco para descubrir las escaleras al piso de abajo, sin embargo, siguió explorando en el mismo piso. Al entrar a otro cuarto, encontró a otra enfermera, sin embargo, detrás de ella había otra botella. Se armo de valor y corrió hacia ella, sin embargo, fue lastimado. Al salir del cuarto, decidió probar una de estas botellas, su sabor era extraño, pero lo hacía sentirse bien. Al acabar de beberla, se sentía curado, como si aquel rasguño provocado por la enfermera no hubiese sucedido.
Al entrar al siguiente cuarto, se llevo dos grandes sorpresas, primero al descubrir que la arquitectura de este cuarto desafiaba la del hospital, y la segunda al ver que en lo inexplicablemente alto de este cuarto se encontraba algo muy valioso para él, el collar que le había regalado a Mayra cuando su relación había comenzado. “¡¿Cómo rayos llego esto aquí?! Se pregunto a si mismo. Por más que se estirara, no lograría alcanzarlo, así que se rindió y dejo la habitación. La habitación al lado era más grande, sin embargo en ella se encontraba otra enfermera, de nuevo se armo de valor y tomo lo que había del otro lado de la habitación, esta vez, a demás de la botella energizante, tomo una caja, al abrirla encontró balas.
Al ya no haber nada que explorar en este piso, bajo por las escaleras al siguiente. En este había un poco mas de luz, la puerta que conducía al pasillo estaba bloqueada por camillas. De nuevo había un baño cerrado y otro abierto. Al entrar a este se horrorizo, sangre en todo el piso, y, en el centro del cuarto, una botella energizante. “nunca sobran estas” pensó, y la cargo.

YAY!!
Asi es chicos y chicas, el nuevo y esperado capitulo de shb ha sido revelado!!
(Si no le entienden pasense por las entradas anteriores para conocer el resto de la historia)

2 comentarios:

Chadan dijo...

Genial, ya había tardado, por cierto olvidaste ponerle tags, eso me dificulto buscar las otras entradas!!!

IV - L' Empereur dijo...

Yo lei (e incluso escribi algunas de) las otras entradas y no le entiendo.